Facultad de Psicología y Terapia de la Comunicación Humana UJED busca concientizar a sus estudiantes sobre la violencia

Por: Dirección de Comunicación Social - 16 de marzo, 2020

En la Facultad de Psicología y Terapia de la Comunicación Humana de la Universidad Juárez se dictó la conferencia "Masculinidades libres de violencia", impartida por el sociólogo Sergio Luis Hernández Valdés con el objetivo de concientizar a los estudiantes varones de que en la perspectiva de género también los hombres tienen un papel importante, pues son parte del problema, pero igualmente de la solución.

Dentro de la dinámica de la conferencia, a la que asistieron cerca de 100 jóvenes de la Facultad de Psicología y Terapia de la Comunicación Humana y de la Facultad de Ciencias Químicas, el conferencista explicó algunos de los estereotipos que están presentes en la sociedad y por los cuales se presenta la violencia de género.

"Dentro de los estereotipos se tiene una creencia generalizada sobre los atributos que caracterizan a hombres y mujeres; al género femenino se le conoce por su emotividad, ser más débil, la belleza, el erotismo, y en general las profesiones de servicio; mientras que al género masculino se le considera más racional, fuerte, proveedor del hogar, feo, la genitalidad, y se les considera mejor para las profesiones rudas".

Mencionó que encasillar a los géneros en estos estereotipos es lo que ha dificultado que se vea al hombre como parte de la solución. Explicó que en el caso de los feminicidios el hombre es parte del problema, pero no se considera como parte de la solución, "…se puede incluir a los hombres en las soluciones, la violencia en sí no es parte de la naturaleza humana, si se ubica al hombre en ese estereotipo se limita a que es violento aun cuando la agresividad es el rasgo biológico, no la violencia, eso es un constructo social".

"La restricción emocional y la obsesión por los logros y el éxito son los dos pilares que sustentan la masculinidad hegemónica, y en la actualidad esta combinación es muy mala, pues está generando hombres violentos que quieren alcanzar grandes puestos y no saben manejar sus emociones, pues la única aceptable es la ira", continuó.

Y concluyó con la afirmación de que "…todas las personas tenemos algo que hacer para construir masculinidades libres de violencia: la familia, la escuela, las instituciones, la religión, los medios de comunicación, los grupos de amigos; todos desde su trinchera. Por ello, propongo trabajar en dos ejes, promover nuevos rituales de iniciación masculina; y realizar un trabajo social, familiar y personal de reconciliación con el padre".