El calor impacta en seres humanos, medio ambiente y biodiversidad: Becerra López

La ola de calor presentada en el norte del país no sólo afecta a los seres humanos de manera directa, sino que impacta en el medio ambiente y a la biodiversidad, indicó el investigador de la Facultad de Ciencias Biológicas de la Universidad Juárez, Jorge Luis Becerra López, quien además resaltó que estos fenómenos favorecen al desequilibrio de los ecosistemas.

El doctor Becerra López se dedica a la investigación desde hace más de 10 años y destaca por los estudios que ha realizado con especies endémicas y su relación con el cambio climático; sus resultados se han publicado en revistas científicas a nivel internacional. Actualmente forma parte del Sistema Nacional de Investigadores del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología.

Becerra López relató que los cambios climáticos son cíclicos, como el aumento de la temperatura, lo cual está fundamentado en estudios paleoclimáticos que dan una visión amplia sobre estos eventos, por lo que las especies de animales y plantas históricamente han presentado adaptaciones a estos cambios, sin embargo, las acciones antrópicas han disminuido la capacidad de respuesta de las especies ante esta problemática ambiental.

El experto explicó que “… hoy en día estamos en un escenario de cambio climático distinto, los anteriores que se habían suscitado tenían la ventaja de ser en forma paulatina y había una capacidad de respuesta de las especies, sin embargo, el cambio de clima que se ha presentado en los últimos años es más acelerado, por lo que disminuye la capacidad de respuesta de ciertas especies…”.

El investigador relató que el aumento de temperatura impacta de diferente manera a los organismos, ya que no todas las especies se ven afectadas de manera negativa, algunas se ven favorecidas por estos cambios de clima, como es el caso de las especies invasoras, lo cual también genera una problemática en el ecosistema.

Explicó que “… la capacidad depredadora de algunas especies es bastante amplia, provocando desequilibrio ecológico en algunas zonas, como es el caso de la ‘rana toro’, que se encuentra distribuida en los diferentes continentes, siendo su capacidad depredadora su principal característica, lo que provoca que especies de plantas nativas y animales se vean disminuidas”.

“El desequilibrio en los ecosistemas y su biodiversidad a través del cambio climático afecta de manera indirecta al ser humano en la propagación de enfermedades…”, argumentó Becerra López, ya que –dijo- estas variaciones ambientales promueven que especies vectores de enfermedades encuentren las condiciones adecuadas para su distribución y por consecuencia aumenta su probabilidad de colonización en diferentes entornos de los ecosistemas.

El experto compartió que un ejemplo de lo anterior es la propagación del vector del dengue, que al aumentar su distribución algunas especies de mamíferos encuentran en el ser humano una fuente de alimento para las hembras de esta especie, lo que representa un problema en la salud pública de las regiones donde la temperatura ha aumentado y de acuerdo con las tendencias climáticas se agudizará en los próximos años.

Los estudios continúan, con el objetivo de encontrar una respuesta a factores que puedan significar pérdida de especies, cambios en los ecosistemas o nuevos escenarios de riesgo para la biodiversidad de las regiones que se ven afectadas por el clima cambiante. Actualmente la Facultad de Ciencias Biológicas, a través del Laboratorio de Cambio Climático y Conservación de Recursos Naturales, está en estudios continuos que permitan generar estrategias para la mitigación de los efectos adversos de esta problemática ambiental.