UJED cumple su deber de reconocer derechos laborales de sus académicos
Por: 16 de mayo, 2016
-Entrega reconocimientos a maestros jubilados en su día
La Universidad Juárez del Estado de Durango (UJED), a través del Sindicato de Personal Académico (SPAUJED), al mediodía de este domingo 15 de mayo celebró el “Día del Maestro”, bajo los arcos del emblemático Edificio Central universitario, con la ya tradicional entrega de reconocimientos al “Mérito Académico”, a docentes jubilados en 2016 con 28 o más años de servicio.
En esta emotiva ceremonia fueron reconocidos por las autoridades encabezadas por el rector Oscar Erasmo Návar García y el secretario general del SPAUJED Jesús Abraham Soto Rivera, 52 académicos que llegaron al final de su vida laboral con la satisfacción del deber cumplido en las aulas de las diversas Escuelas, Facultades e Institutos de la UJED, tanto del campus Durango como del Gómez Palacio.
Návar García manifestó que “se alcanza a percibir a través del brillo en sus ojos, la emoción de saber que han cumplido con su deber. Han hecho posible que generaciones de alumnos del pasado y del presente tengan un gran futuro, que la UJED tenga rumbo y continúe como máxima casa de estudios en el estado, gracias a su trabajo y al de la gran comunidad universitaria a la que seguirán perteneciendo como un elemento importante”.
El Líder sindical al reconocer la trayectoria de estos académicos -dijo- “nos hubiera encantado tenerlos con nosotros mucho tiempo más, pero comprendemos que su ciclo concluyó para emprender otro. En el camino de la vida hay un lugar y un tiempo para cada cosa, todos deseamos que este descanso conquistado se convierta en un etapa de paz para dedicarse a la construcción de un nuevo proyecto personal junto a sus seres queridos”.
A nombre de sus compañeros jubilados Ana María Álvarez del Castillo González, quien se desempeñó como catedrática por 39 años, adscrita a la Facultad de Trabajo Social, conmovida a punto de las lágrimas expresó que “no sólo es cumplir con el deber, los académicos debemos llevar en nuestra sangre una pasión por el quehacer académico, eso hace la diferencia.
“Amar nuestro trabajo, respetar nuestra casa de estudios, dar lo mejor de nosotros mismos, prepararnos día con día, vivir los valores universitarios y sobre todos ser agradecidos, por ello hoy me permito decir: Gracias querida y amada Universidad Juárez del Estado de Durango”, Finalizó.