Se presenta en la UJED el libro “¿Gorditos o Enfermos?”
Por: 27 de abril, 2016
-“¿Gorditos o enfermos?”, es el título de la obra de la autoría de los doctores Beatriz Salazar Vázquez, Miguel Salazar Vázquez y Ruy Pérez Tamayo, quienes unieron su esfuerzo al investigar sobre el panorama actual de la obesidad infantil en el país y ofrecen, a la vez, varias posibles soluciones y recomendaciones para evitar que los niños de hoy se conviertan en los obesos de mañana.
La presentación de la obra se realizó en el lobby “Guadalupe Victoria” del Auditorio Universitario, con la presencia del secretario general de la Universidad Juárez, José Antonio Herrera Díaz, acompañado del delegado federal de la SEP, Emiliano Hernández Camargo y de la directora de Difusión Cultural de la UJED, Corín Martínez Herrera.
La obra editada por el Fondo de Cultura Económica pretende ser un instrumento práctico y de consulta para prevenir o, en su caso, combatir el sobrepeso y la obesidad desde edades tempranas.
Los comentarios iniciaron con la participación del doctor emérito de la UNAM y divulgador científico Ruy Pérez Tamayo, quien después de explicar la finalidad que tienen las presentaciones de libros, mencionó que \"…la obesidad es un problema mundial de gran magnitud; según datos del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), en México el sobrepeso infantil crece 1.1 por ciento cada año. Este problema ha llevado a investigadores de distintos ámbitos a enfocar sus esfuerzos para explicar y, en su caso, abonar en las respuestas y soluciones sobre este tema”.
Agregó que “…en años recientes, por diferentes razones cada vez más niños y jóvenes alcanzan peso excesivo no saludable; las causas más citadas son el tipo y la cantidad de alimentos que ingieren y la inactividad física. Otras causas menos comunes son trastornos hormonales, disfunción de ciertos órganos que participan en el aprovechamiento de los alimentos y factores hereditarios. No es raro que varias de estas causas actúen juntas, sobre todo en familias con problemas de control de peso; los niños cuyos hermanos, padres y otros parientes tienen sobrepeso corren mayor riesgo de padecerlo, no sólo por el factor hereditario sino también porque comparten los mismos hábitos alimentarios y de actividad física. Las costumbres personales se adquieren sobre todo de los tres a los siete años de edad; la mayoría de ellas se aprenden por imitación, primero en el hogar y después en la escuela”.
El investigador señaló que esta condición ha tomado protagonismo en las esferas de salud de varias latitudes, haciendo a la obesidad un objeto de estudio prioritario para los médicos. Expuso que en 1988, 8 por ciento de la población de cinco años o menos presentaba sobrepeso; sin embargo, en 2012 este índice alcanzó el 9.7 por ciento, ello acorde con datos del INSP.
En edades escolares, de los seis a los doce años, la brecha fue mayor al pasar de 9 a 14 por ciento de 1999 a 2012, mientras que en adolescentes pasó de 11.1 por ciento en 1988 a más de 34 por ciento.
\"Esto representa un problema nacional y casi una emergencia de salud\", señaló Pérez Tamayo, tras lo cual se resolvió a escribir este libro, mismo que desde el título pretende llamar la atención de los padres de familia, que en la mayoría de los casos no discierne los riesgos del sobrepeso y obesidad infantil.
La Doctora Beatriz Salazar, investigadora de la UJED, al hacer sus comentarios explicó que “…el principal interés de este estudio es prevenir la obesidad a través de modificar cinco hábitos alimenticios: el primero, comer despacio, dejando cada bocado al menos 30 segundos en la boca; segundo, no repetir porciones, evitando repetir platillos o aumentar las porciones; tercero, evitar todas las bebidas azucaradas, haciendo del agua simple la principal bebida; cuarto, comer sentados en la mesa sin distractores como la televisión o dispositivos móviles; y quinto, establecer y respetar horarios de comida, haciendo sólo tres alimentos al día”.
Agregó que \"…en el estudio que se ha realizado con niños y niñas que están en el nivel secundaria, los resultados del programa han sido buenos, los niños bajan al menos tres kilos de peso en un año; iniciamos con 54 niños, ahora tenemos 600 y vamos a llegar a 1,200”.
Y destacó que la investigación está respaldada por el Colegio Nacional, el Instituto Nacional de Salud Pública, la Universidad Juárez del Estado de Durango (UJED), la Universidad de California en San Diego y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM)\".
Por su parte, el doctor Miguel Salazar Vázquez compartió que “… es imposible tener un estimado del tiempo que pudiera tomar revertir los índices de obesidad infantil en México; sin embargo, urge comenzar con programas de prevención para no seguir relegando el tema, y en este caso hemos comenzado con niños de secundaria”.